martes, 8 de mayo de 2018

L E T R A S

Las letras, esas mismas letras que un día me ayudaron a sacar todo lo malo que tenía adentro, hoy ya no están. A algunas las tengo escondidas. Y con otras a veces saludo, pero es un saludo esquivo. Un saludo como despedida. Pero una despedida como irreal, porque ninguno de los dos quiere irse. ¿O será tan solo por los recuerdos? Porque sí tenemos muchos recuerdos, recuerdos que a muchos harían quedarse. Recuerdos de tantas noches, de tantas risas, de tantos miedos, de tanto todo. Y de pronto ninguno de los dos sabe bien qué pasó. De un momento a otro estuvimos tan separados que incluso aquellos recuerdos parecieron ajenos. Parecieron producto de otra amistad. Nos veíamos, pero no eramos más nosotros. Aquellos que veíamos en esos recuerdos casi borrosos parecían otros. Y quizá sí lo eramos, porque habíamos cambiado. ¿Evolucionamos? Quién sabe. Sonaría romántico decir que sí, pero no, yo creo que sucedió algo más. Algo que ni los dos podemos entender bien. Mejor dicho, entender al menos mínimamente. Y tal vez esa sea la razón de estos saludos tan fríos, y de estos recuerdos tan secos.

¿A dónde fueron esas letras?, ¿se fueron para no volver?, ¿se fueron huyendo de algo, de alguien?, ¿por qué se fueron?, ¿por qué no vuelven?, ¿será que se cansaron de buscar respuestas?, ¿o será que ya se hartaron de ser preguntas?

♪♫[Nachlader - An die wand]