martes, 6 de junio de 2017

Día de sol.


No recuerdo con exactitud qué día de la semana era. El sol dejaba entrar toda su luz por la ventana y ésta alumbraba cada centímetro de la cama donde yo estaba recostado. De pronto la luz en mi cara se volvió tan molestosa que me obligó a cambiar de lugar. Mientras me iba sentando en el filo de la cama me di cuenta que tú me estabas observando desde el otro lado del cuarto.
Entonces simplemente lo supe.
Me miraste sonriendo y por primera vez tus ojos me dijeron toda su verdad. Me mandaste tres besos volados y te despediste sutilmente azotando la puerta.
Y aunque había mucho ruido en la calle, juraría que pude escuchar una lágrima tuya caer sobre el piso mientras bajabas las gradas. La escuché con tanta claridad que el sonido retumbó haciendo eco en mi pecho, y no pude dejar de escucharlo sino hasta que se  hubo confundido con el arrítmico latir de mi corazón.
Caminé hacia la ventana, para acomodar la cortina de tal forma que no pudiera entrar ni un rayito de luz. Me acosté en el piso, cerré los ojos, y finalmente entendí que nunca más te volvería a ver. 

♪♫ [Sing - Blur]

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